miércoles, 3 de noviembre de 2010

Flautas de émbolo (4). Slide whistles de madera y caña. Flautas en forma de caja.

Aunque de lo que escribo en las entradas anteriores podría deducirse que la flauta de émbolo es un invento de mediados del S. XIX, la verdad es que estos artilugios se utilizaban desde bastante antes en diversos lugares del mundo incluyendo la propia Europa, generalmente elaborados en bambú o madera. Este ejemplar es de origen asiático, muy común y bastante reciente, pero es un buen ejemplo de flauta popular de bambú.


Pero si la forma cilíndrica es la más frecuente (obvio en el caso de las flautas de caña), no es la única manera de construír una flauta. Entre las piezas más raras de mi colección se encuentra esta flauta de émbolo en forma de caja, datada en los años de la Guerra de Secesión norteamericana (1861-1865) y presumiblemente construída por un soldado.

A falta de las herramientas adecuadas para fabricar piezas perfectamente cilíndricas, el artesano optó por construír una caja de madera en la que entra un émbolo con forma de marco o bastidor, también rectangular (figs. 1 y 2), tallando la boquilla y el bisel en un saliente ad hoc de una de las esquinas (fig. 3).

Fig. 1

Fig. 2
Fig. 3. Detalle de la boquilla y el bisel 
Y a continuación, ¡la última adquisición! La he recibido hace un rato por correo y acabo de desembalarla. Así que, aunque dice mi amigo Óscar que no es recomendable publicar en el blog entradas tan largas, no he podido resitir la tentación de mostrar algunas fotos de otra flauta de émbolo de madera con forma de caja.

Mide 23 pulgadas y no puedo decir mucho más de ella, aparte de que viene de Chesterton (Indiana, EE.UU), que parece bastante antigua, y que es uno de los ejemplares más raros que he visto nunca. Parece mucho más elaborada que la anterior. Tiene una D marcada en el émbolo (Fig. 1), lo que hace pensar que introduciéndolo hasta esa altura la nota que se obtiene es Re.
Fig. 1. Detalle del émbolo.
En realidad, tras comprobarlo con un afinador electrónico, la nota es más alta -casi un Mi bemol-. Esto no debería extrañarnos, dado que hasta bien entrado el S. XX estuvo de moda una afinación llamada "brillante", más alta que la que usamos en la actualidad (La = 440 Hz). A lo largo del émbolo hay diversas muescas que señalan la altura de las distintas notas (he observado esto en algún modelo de museo y es frecuente verlo en flautas de émbolo de juguete). Tambien lleva escrito a mano el número 1024, lo que puede indicar que el artesano la manufacturara en serie y no fuera una pieza únicamente para disfrute propio como la anterior. Ahí van más fotos.


Aunque habrá que restaurarla un poco para poder apreciar todas sus posibilidades, produce un sonido grave, dulce y oscuro, menos penetrante que el que se obtiene de las flautas de metal, plástico o baquelita. Estoy muy contento con este armatoste (es el más grande de la colección). Si alguien ha visto algo similar y puede aportar alguna información sobre este tipo de flautas, lo agradeceré sobremanera.


PRÓXIMO CAPÍTULO: FLAUTAS DE ÉMBOLO DE JUGUETE

lunes, 1 de noviembre de 2010

Flautas de émbolo (3). El slide whistle de Distin & Sons, la primera flauta de émbolo moderna



Las primeras flautas de émbolo fabricadas industrialmente empezaron a verse en Europa a partir de 1840. Las manufacturaba la empresa de la familia Distin, afamados músicos e inventores de instrumentos. Ellos fueron los principales valedores de los inventos de Adolphe Sax en el Reino Unido. John Distin y sus cuatro hijos interpretaban, entre otros instrumentos, la trompeta de varas y el trombón, aunque también realizaron conciertos tocando la flauta de émbolo. En la fotografía, un diminuto slide whistle fabricado por Distin alrededor de 1850. Es probable que en esa misma época el compositor e intérprete Stephen Foster popularizara el instrumento en EE.UU. y comenzara a conocerse como swanee whistle.




PRÓXIMA ENTREGA: Flautas de émbolo (4). Slide whistles populares de madera y caña

domingo, 24 de octubre de 2010

Flautas de émbolo (2). El jazzoflute de Couesnon

La difusión popular de las flautas de émbolo está muy ligada a lo que se conoció como la Era del Jazz, época en que este género hizo furor. En uno de los mayores éxitos discográficos de los años locos, la versión de Whispering de la orquesta de Paul Whiteman  de 1920, la melodía la exponía un swanee whistle. Louis Armstrong también la incorporó en una de sus míticas grabaciones de la década, probablemente interpretada por él mismo. La relación entre la moda del jazz y la flauta de émbolo se ve claramente reflejada en la fabricación por parte de la prestigiosa firma Couesnon de París de un instrumento llamado jazzoflute, que podéis ver en esta fotografía.

Jazzoflute de Couesnon (París c. 1920)

Jazzoflute (detalle)

A continuación, el jazzoflute en una ilustración del artista Georges Lepape para la revista Gazette du Bon Ton (1922):
Por desgracia, tal como ocurrió con otros muchos instrumentos de los años 20,  tras el crack de 1929 la flauta de émbolo o swanee whistle acabó en el mismo lugar que los sueños de prosperidad y la alegría de las clases populares. Desde aquel momento se vió relegada al mundo de los juguetes y los instrumentos novelty. Sus graciosos glisandos quedaron encasillados en la categoría de efecto cómico para el cine o los espectáculos de variedades. Cada vez que algo sube o baja en los dibujos animados más clásicos, el sonido que acompaña a la acción es el de una flauta de émbolo.

Continuará

viernes, 22 de octubre de 2010

Flautas de émbolo; la jeringuilla musical (1)


Inauguramos este blog sobre instrumentos poco habituales o de juguete con la flauta de émbolo. También conocida por los nombres de swanee whistle, slide whistle o lotus flute, es una variante sin agujeros de la antiquísima flauta de pico (la flauta dulce que tocamos en el cole).
Fig. 1. Familia de Lotus Flutes
La diferencia entre la flauta de émbolo y su antepasado está en la ausencia de agujeros; las notas se producen deslizando un émbolo o pistón a lo largo del interior cilíndrico del instrumento.
Fig. 2. Una lotus flute y su émbolo
Las flautas de émbolo se hicieron muy populares en Europa y Estados Unidos en los años 20 del pasado siglo. En esta época, como podremos ver en posteriores ejemplos, se inventaron o rediseñaron muchos instrumentos encaminados a facilitar el acceso a la música a las clases populares. La flauta de émbolo prometía permitir tocar un instrumento a toda persona que pudiera cantar, al carecer de cualquier mecanismo, digitación o necesidad de una embocadura especial para producir el sonido. Los instrumentos que se muestran más arriba están entre los mejores que se produjeron en la época. Se fabricaron en Londres y se les dio el nombre (que aparece grabado en el propio instrumento) de Swanee Whistle o Lotus Flute. El primero de los nombres seguramente hace mención a una canción que se hizo muy popular a mediados del S.XIX, Swanee River, de Stephen Foster -autor también de "Oh, Susanna"-. Foster popularizó bastante el uso del instrumento, así como el del "honky-tonk piano". Las flautas de la fotografía son de baquelita, un derivado endurecido del caucho. Como podréis ver (Fig. 1), se comercializaron en varios tamaños y calidades. La más grande de las que se observan en la foto -y que fue el primer instrumento que toqué cuando era niño- es un modelo de lujo que cuenta con acabados en alpaca de plata y marfil. Además, para mejorar aún más su calidad, el interior de la flauta está reforzado por una camisa de metal por la cual se desliza el émbolo, evitando el desgaste de la baquelita y garantizando un uso suave y preciso, lo que lo convierte en un instrumento verdaderamente profesional.

MODEL DE LUXE
SWANEE WHISTLE
 RFG.
OR LOTUS FLUTE
MADE IN LONDON
ENGLAND
PRO. PATENT
REG. DESIGN
REG. U.S. PAT. OFF



PRÓXIMO CAPÍTULO: "FLAUTAS DE ÉMBOLO: EL JAZZOFLUTE DE COUESNON"

En breve incorporaré archivos de sonido y vídeo a esta entrada. Vuelvan a visitarnos.

¿Pero... con eso se toca música?

Desde que alcanzo a recordar me he sentido atraído por cualquier objeto con el que se pudiera hacer música, se tratara o no de un instrumento diseñado para tal fin. Lo primero que toqué fue una antigua flauta de émbolo que había en casa. Después vinieron el arpa de boca, la ocarina, las flautas de plástico, el ukulele, dos walkie talkies, la bomba de la bicicleta y hasta el grifo de la cocina, así como una legión de pequeños instrumentos de bajo precio, algunos de los cuales conservo. Siendo adolescente tuve mi primer instrumento profesional, un clarinete -y después otros muchos-  pero nunca se ha desvanecido en mí el amor por todos aquellos cacharros aparentemente absurdos. En este blog quiero agradecer a esos instrumentos las horas de satisfacción que me han proporcionado, y que sigo reviviendo cada vez que encuentro por ahí un juguete que incorporar a esta colección que ahora comparto con vosotros. En la medida de lo posible, dada la falta de tiempo, acompañaré las fotos y los textos con archivos de sonido o vídeo.
El criterio para exponerlos aquí no es muy estricto; igual da que se trate de un instrumento folklórico, un sintetizador o un saxofón; basta con que sean curiosos, extravagantes o inusuales.